Cannigione
Cannigione es una playa situada en la localidad que lleva su mismo nombre, en el municipio de Arzachena.
Su arena gruesa y brillante está rodeada por una abundante vegetación mediterránea. La playa extiende hasta el puerto deportivo, con un color cielo en el agua y un fondo rocoso. Los preciosos atardeceres sin duda son un buen momento para disfrutar con los amigos.
Al sur de Cannigione está el estanque de Padula Saloni, donde anida la garza imperial, el calamón, la cigüeña negra y el águila pescadora, que entre las cañas, juncos y tamariscos encuentran su hábitat ideal.
En una visita a Arzachena descubrirá la fiesta de colores y edificios que muestran todo el estilo de la Costa Esmeralda. Roca, granito rosa y piedras blancas son sólo algunos de los materiales naturales que conforman la arquitectura de las casas. Por todas partes hay los espacios verdes, tiendas y comercios muy cuidados que reciben a la élite del turismo. Aquí se combinan las tiendas de lujo con las de artesanía local típica de la Cerdeña.
Sedilo
Sedilo, situado en el altiplano de Abbasanta, se caracteriza por las casas de piedra antiguas. Destaca la Ardia, una carrera a caballo conocida en toda Cerdeña que se celebra en la fiesta religiosa dedicada a San Constantino.
El pueblo conserva diversos testimonios arqueológicos de monumentos nurágicos, domus de janas y muchas tumbas de los gigantes. El más famoso es el complejo nurágico de Iloi y Puntanarcu, con una fuente característica.
La iglesia dedicada a San Constantino data del siglo XVII. Se pueden admirar esculturas de época nurágica, entre ellas la Perda Fitta que representaría a una divinidad femenina.
El 16 y 17 enero se celebra la fiesta en honor a San Antonio Abate con el encendido de una gran fogata, Sa Tùva, en la plaza de la iglesia dedicada al santo.
Durante el carnaval, las calles del pueblo se llenan de vida con desfiles de carros festivamente decorados, adornados con figuras y representaciones de la tradición popular. Los desfiles están acompañados por cantos sardos característicos, de ritmo libre y ancestral, que evocan el alma más profunda de la isla. Los días 14 y 15 de mayo se celebra la fiesta de San Isidro, patrón de los agricultores: en esta ocasión, carros tirados por bueyes y engalanados con rosas y espigas recorren Sedilo, en una procesión que une devoción, identidad campesina y emoción compartida.
El 1 de septiembre se celebra una carrera característica, la de los asnos, en honor a San Basilio Magno.
Para los aficionados al excursionismo a pie, en bicicleta o a caballo, se recomienda el itinerario a los bosques de Sedilo, con un sistema de señales de madera que indican los recorridos.
Cabe visitar el Parque arqueológico de Iloi, con varios monumentos nurágicos, pozos nurágicos y tumbas de gigantes.
Porto Flavia
La gran infraestructura de la mina excavada en la roca datade 1924, creadapor el ingeniero Cesare Vecelli que bautizaron con el nombre de su hija. En su tiempo, sirvió paratransportar la materia prima extraída en las minas de Masua, y hoy da nombre a esta amplia playa.
La playa se caracteriza por el fuerte contraste con la zona verde que la rodea, de gran belleza por sus colores y su vegetación definida y abundante.
En la ciudad de Masua, en el municipio de Iglesias, hay un balneario muy apreciado por los aficionados al buceo. La pared vertical se eleva por encima del paisaje marino y mira hacia la línea de horizonte dominado por el enorme Pan deazúcar.
Pan de Azúcar es unauténtico monumento, erosionado por el mar y el viento, de 133 metros de altura. Sivisitasla playa al atardecer, podrás contemplar sus contornos enmarcados en unaluz de multitud de tonos, del naranja al amarillo, que se extiende hasta la desembocadura del puerto minero.
Las estrellas de Sartiglia, emociones eternas
Aliento de corceles, pateo de cascos, tintineo de arreos, repique de tambores y entusiasmo del público: un espectáculo que ofrece emociones indelebles. Sa Sartiglia es un carrusel ecuestre cuyo origen se encuentra en los rituales paganos de fertilidad y prosperidad, evento por excelencia de Oristano, ciudad protagonista de la historia de Cerdeña de época del juzgamiento. Más de un centenar de caballeros siguiendo al legendario componidori, enmascarados y vestidos con elegantes vestidos sardo-españoles, son lanzados al galope sobre caballos finamente tachonados, acompañados por el redoble de los tambores. La prueba de habilidad consiste en atravesar las estrellas suspendidas con la espada. Las "carreras por la estrella" son dos: el domingo de carnaval (11 de febrero) se retan los caballeros del gremio de los Campesinos, el martes de Carnaval (13 de febrero) los del gremio de los Carpinteros. El lunes está dedicado a los jóvenes, con la Sartigliedda. Siguen a las carreras las actuaciones temerarias de laspariglie, luego la fiesta de carnaval continúa en las plazas hasta altas horas de la noche. No faltan los dulces de almendras y vernaccia, delicioso vino local.
Arborea
Arborea nace en el centro del estanque de Sassu recién saneado, en 1928 como Villaggio Mussolini, rebautizado Mussolinia di Sardegna en 1930, y finalmente con el nombre actual en 1944, tras el fin del fascismo. Inmerso en el verde de los campos, el pueblo está habitado por colonias sobre todo procedentes del Véneto, con una estructura típica de las ciudades de fundación fascista, con edificios marcados por un gran eclectismo. Las avenidas con árboles, las casas de dos pisos de estilo liberty y neogótico, todo ello rodeado de un paisaje verde. Los edificios públicos (la escula, el hotel y el palacio del Municipio) están frente a la plaza Maria Auxiliadora, donde está la iglesia parroquial de estilo tirolés.
En el Palacio Municipal se muestra la Colección Cívica Arqueológica: una colección de restos procedentes de la necrópolis romana de S'Ungroni. La zona es de gran interés también por su naturaleza y su fauna: en el estanque S'Ena Arrubia, en la costa, habita un gran número de aves palustres. En la Marina d'Arborea, casi frente a la playa, se extiende un maravilloso y extenso pinar. A unos 9 km está el burgo de pescadores de Marceddì cerca del estanque, dominado por la Torrevecchia del siglo XVI. Aparte de la pequeña ciudad, con sus características arquitectónicas, se recomienda la visita a la bomba de agua de Sassu, inaugurada en 1934, con su destacada altura y sus formas modernistas y futuristas tan innovadoras. Entre los productos enogastronómicos más conocidos, están los lácteos, sin olvidarnos de los productos hortifrutícolas como las fresas. Cada año, el primer domingo de mayo, se dedica una fiesta a las fresas. El último domingo de octubre se celebra la fiesta de la polenta, con degustaciones de la conocida comida véneta, con queso, salsicha y guiso de carne.
La Sciumara - Rada di Mezzo Schifo
La playa se encuentra en la localidad de Palau y también pertenece a este municipio. La arena es bastante gruesa y de color crema y el fondo marino es arenoso y bastante poco profundo. La playa está enmarcada por los acantilados al oeste de Palau. El juego de colores que se puede observar hasta la playa es de gran belleza, entre el verde de la maquia mediterránea y el bosque de robles, el azul de las aguas y el color claro de la arena. A la belleza de este lugar se añade la maravillosa vista de la isla de La Maddalena a lo lejos. Los habitantes de Palau también llaman a la playa "Sciumara" (que significa "estuario" en dialecto de Gallura), que procede de la desembocadura del torrente que cruza la playa.
El nombre "Mezzo Schifo" procede probablemente del pecio de medio barco que se hundió frente a esta playa.
Viniendo de la carretera estatal 133-bis, siga las indicaciones hacia el faro antes del pueblo de Palau. Después de medio kilómetro, gire a la izquierda y luego otra vez a la izquierda y después de 500 metros llegará al aparcamiento, desde donde hay unos 100 metros a pie hasta la playa.
El fondo marino es bastante poco profundo y las características de la playa la hacen especialmente adecuada para que jueguen los niños.
Los servicios incluyen un amplio aparcamiento que también es adecuado para autocaravanas, instalaciones para discapacitados y una cafetería. El variado e interesante fondo marino es ideal para submarinistas y buceadores.
Parque del Monte Linas - Oridda - Marganai
En el corazón de la comarca de Iglesiente, te fascinarán los paisajes multiformes modelados por el tiempo y la naturaleza. Sobre todo de una zona de gran valor naturalístico conocida como Monte Linas-Oridda-Marganai, que se extiende a lo largo de 22 mil hectáreas y está incluida en los territorios de Domusnovas, Fluminimaggiore, Gonnosfanadiga, Iglesias y Villacidro. La zona es predominantemente montañosa y morfológicamente variada: desde el granítico monte Linas hasta el macizo calcáreo de Marganai, pasando por la escarpada meseta de Oridda (600 metros de altura) que los separa y donde se extiende el frondoso bosque de Montimannu. El punto más alto es Perda de sa Mesa (1236 metros). En las zonas de granito encontrarás gargantas profundas y espectaculares cascadas, como las de sa Spendula, de Muru Mannu y de Piscina Irgas. Aquí florecen plantas medicinales (manzanilla, belladona, caléndula) y otras especies endémicas. A lo largo del río Linas encontrarás el madroño gigante. Bosques frondosos cubren las zonas más altas, pobladas por ciervos, jabalíes, gamos, comadrejas, martas, muflones, zorros y aves poco comunes como ratoneros, águilas reales, gavilanes y buitres leonados.
En las zonas calizas de la montaña, las filtraciones han creado ríos subterráneos y sugerentes cuevas, como la de San Giovanni en Domusnovas, que perfora el monte Aqua. A lo largo del siglo XX se utilizó como túnel transitable: con 800 metros de longitud, se puede recorrer para admirar estalactitas y estalagmitas milenarias. Dentro del parque natural, los alcornoques se alzan en las partes más bajas, mientras que los perfumados arbustos mediterráneos crecen sobre rocas antiguas, que conservan las huellas de la actividad minera que caracterizó la zona de Iglesiente. Aquí encontrarás pueblos y explotaciones mineras en desuso, ejemplos de la arquitectura industrial sarda: en la meseta de Oridda están las ruinas de una planta minera del siglo XIX.
Parte del monte Linas alberga el parque cultural Giuseppe Dessì: los paisajes que lo integran son los realzados por las evocadoras obras de uno de los mayores escritores de la isla. Para realzar y promover el patrimonio natural de Marganai, en cambio, se realizó el Jardín Linasia. Desde Iglesias, se llega a la zona del parque por una pista (a la entrada de la ciudad) que conduce a la antigua cantoniera de Marganai. Mientras que desde la carretera provincial 126 Iglesias - Guspini, continuando hacia la fracción de San Benedetto, tomarás una pista que conduce a Case Marganai. Dentro del parque, se pueden realizar largas excursiones a pie o paseos a caballo, incluso durante los campamentos de verano, con cursos de formación y educación ambiental.
Buggerru
Un escenario de arqueología industrial que se asoma a un espléndido litoral. Buggerru nace de un pueblo minero fundado en 1864. Actualmente es un centro turístico, poblado por alrededor de mil habitantes, un quinto respecto a comienzos del siglo XX. El actual pueblo, donde sobresale la iglesia parroquial de San Giovanni Battista, se compone de casas dispuestas abanico sobre la escenográfica desembocadura al mar del valle del monte Caitas, un canal que dio el nombre a la mina Malfidano, la más importante de la epopeya minera entre el siglo XIX y comienzos del siglo XX y activa hasta el año 1979: en algo más de un siglo Buggerru, conocida por los romanos por la plata, produjo más de un millón de toneladas de zinc y 200 mil toneladas de plomo. Su moderno puerto coronado por la salida del Túnel Henry, es actualmente un museo a cielo abierto, un tiempo recorrido por el tren que transportaba el mineral extraído. Para completar tus conocimientos del mundo minero se encuentra el museo del Minero, restos de pozos y maquinarias, aldeas y senderos, las residencias y los edificios de la dirección. Entonces había electricidad, hospital escuela, biblioteca y un teatro. Se la llamaba la petite Paris por el ambiente creado por los directores (y familiares) de la sociedad francesa propietaria de la actividad de extracción. Sin embargo, los mineros vivían en condiciones inhumanas. En 1904 se convoca la primera huelga. Como respuesta el ejército disparó a los operarios: tres murieron y muchos resultaron heridos. Era el 4 de septiembre quedará impreso como el día de la Masacre de Buggerru. Fue la primera revuelta sindical, a la cual siguió la primera huelga general en Italia. En el pueblo se exponen las esculturas de Pinuccio Sciola dedicadas a los caídos.
En los alrededores del pueblo existe un sugestivo tramo de costa delimitada al norte por Cabo Pecora y Portixeddu. A dos kilómetros al sur de pueblo, existe la espléndida ensenada de Cala Domestica, una joya encastrada entre los acantilados calcáreos: al fondo un fiordo vigilado por una torre española (siglo XVIII), encontrarás una playa de arena suave de colores entre blanco, dorado y ámbar. Hasta 1940 de aquí se embarcaban los minerales extraídos en las minas de Masua. Delante se asoma un mar de entre los más hermosos de Cerdeña. A la derecha del puerto surge la playa de Buggerru de una arena suave y bañada por el mar celeste. Al norte encontrarás las dunas de arena de San Nicolao, y a su espalda el orgulloso pinar, ideal para excursiones en mountain bike. Las playas se llaman Is Compingius (los pinos) e Is Compingieddus (pequeños pinos). Hay que destacar la Gruta Azzurra, los farallones de punta Nido del Águila y tantos acantilados altos más de cien metros, perfectos para el climbing. Entre junio y julio, no te pierdas la feria del Pescado y de los erizos de mar,
Muralla y torre de Mariano
La ciudad se encuentra orientada al N de Campidano y se asoma al golfo de Oristano. En las cercanías, transcurre el río Tirso y se encuentran las lagunas de Santa Giusta y de Cabras, como final de una amplia planicie rodeada por las alturas del Monte Arci. El territorio documenta la continuidad de asentamiento de la época prenurágica, como importantes testimonios arqueológicos de la presencia fenicio-púnica, romana y bizantina. En la época medieval, fue capital del renio de Arborea para, después, anexarse a la Corona de Aragón. Desde principios del siglo XVI, se suceden los acontecimientos históricos de Cerdeña, hasta convertirse, en el siglo XX, en el municipio de la homónima provincia.
A historia urbanística de Oristano está unida a doble filo con los acontecimientos ocurridos del reino de Arborea, último a caer bajo los aragoneses entre finales del siglo XIV y principios del siglo XV. Oristano era la capital del juzgado y, como tal, alojaba al soberano, en su palacio, y debía estar provista de una estructura fortificada adecuada.
A día de hoy, la estructura urbanística de la ciudad revela el núcleo original: son tres los puntos de confluencia de las calles, correspondientes a otras tantas localidades, exactamente la actual plaza Roma, orientada al N, Largo Mazzini, al N/E y plaza Mannu, al S. Estas tres zonas eran atravesadas por las murallas, que protegían el corazón de Oristano: la muralla debía tener una altura de, aproximadamente, 5 ó 6 metros, turrita, y partía de la actual plaza Roma hacia la calle Mazzini, para llegar a la torre de Portixedda. Las murallas continuaban hacia la actual calle Solferino, después, hacia la plaza Mannu. En esta última, como en la plaza Roma, se encontraban las puertas de la ciudad, la Puerta Mari y la Puerta Manna respectivamente, así como la Torre de San Cristoforo (o torre de Mariano). Actualmente quedan pocas ruinas de las antiguas murallas: un torreón en la calle Cagliari y algunos restos en al calle Solferino, en el corral del Asilo Boyl y en la calle Mazzini.