Etéreas voces masculinas entonan antiguos cantos gregorianos. En el interior del actual monasterio de San Pedro de Sorres, en un tiempo catedral, no sólo tu mirada quedará hechizada por la belleza arquitectónica, sino que tus oídos también se embelesarán con sonidos melódicos.

La hermosa iglesia románica se alza sobre una colina en el territorio de Borutta, en el Meilogu, a poca distancia del pueblo y de la antigua calzada romana que conectaba el norte y el sur de la Isla. Una ubicación estratégica que ha dado lugar a tumbas de la época bizantina y a una gran cantidad de ajuares funerarios.