El pueblo natal del artista conserva muchas de sus preciosas obras y por ello es la principal meta de este itinerario. La primera etapa es el hermoso Museo Costantino Nivola, que permite conocer el trabajo del artista sardo en una cuidada y organizada exposición. El museo ofrece un interesante recorrido por los trabajos de madurez: desde las grandes madres esculpidas en mármol blanco pulido hasta los bronces arquitectónicos, pasando por las pequeñas terracotas donde la figura femenina se impone con fuerza. También hay una sala dedicada al sand-casting, una técnica inventada por el mismo Nivola que le hizo famoso en América. Otras etapas en Orani son la pequeña iglesia de Nuestra Señora de Itria, en el casco antiguo, en la cual Nivola realizó la fachada con un gran esgrafiado caracterizado por sus típicas formas monumentales y por el encuentro de lo femenino y lo masculino.

La plaza de Sebastiano Satta de Nuoro es un ejemplo de perfecta y sugestiva integración entre una escultura y su entorno, siendo uno de los lugares más visitados de la ciudad y un homenaje al ilustre poeta de la Barbagia. Nivola ha colocado en el interior de la plaza irregular algunas grandes piedras de granito en cuyas cavidades ha distribuido pequeños bronces que muestran a Satta en sus diferentes facetas.